Lollapalooza y una escudería argentina de lujo

El menú del primer día de Lollapalooza Argentina tuvo unos cuantos platos fuertes de la escena local que fueron servidos especialmente para hacer felices a distintos gustos y generaciones: desde Trueno a uno de los herederos del clan Spinetta, pasando por una siempre poderosa Marilina Bertoldi y la resurreción de Chano.

Es más, podemos decir, sin miedo a equivocarnos que tuvimos dos momentos históricos: primero, más temprano, el debut de Vida Spinetta (hija de Dante y nieta de Luis Alberto, prócer nacional). La pequeña sub15 demostró arriba del escenario que tiene la pisada fuerte y que su padre tiene razón: no hay que descuidarse ni perderle el rastro porque seguramente tengamos a una nueva estrella ahí. Pero después, como segunda postal para la historia, llegó la confirmación de un run run en sala de periodistas y pasillos varios: el regreso de Tan Biónica.

La jornada arrancó con An Espil en uno de los escenarios principales. Era temprano y por supuesto no estaban aún las cien mil personas que recibió el parque en su momento más álgido pero claro que había un gran puñado de miles de jóvenes que no querían perderse nada y descubrir todo lo que pudieran. La fuerza de An se destacó en ese comienzo, una misma fuerza que vimos explotar en el show de Marilina Bertoldi, también. La música y compositora santafesina se volvió referente de una nueva camada de artistas que si bien hace mucho que se suben al escenario y la descosen, obtuvieron mayor reconocimiento en los últimos cinco años y terminaron convirtiéndose en estrellas argentinas, en esas figuras que no pueden faltar si alguien quiere tener un festival convocante. "Las mujeres ya no telonean, las mujeres encabezan cartel", se podría decir parafraseando a Shakira.

También durante las primeras horas de la tarde estuvo tocando Guillermo Beresñak, quien se lució en el escenario Alternativo el mismo día que estaba estrenando en Spotify su nuevo disco llamado "Morón", en honor a sus raíces bonaerenses. La obra incluye una reversión de "Agujeros Negros"; de Juana La Loca que sonó en el Hipódromo de San Isidro. La performance sin fisuras demostró, también, por qué es uno de los productores musicales más elegidos del momento. Son pocos quienes no caen en la tentación de que meta mano en sus discos.

Pero no solo fue arriba del escenario que la escena local se mostró contundente: también hubo espacio para otro tipo de intervenciones que hacen única a la experiencia Lollapalooza. Uno de ellos es el Espacio Espíritu Verde donde el músico y youtuber Lichi, un rosarino que milita los derechos LGTBIQ+, se sumó a una movida de Unicef para terminar con los discursos de odio. Desde allí, y rodeado de pibis sub18 hizo énfasis en la necesidad de aceptar las diversidades como una forma de construir un mundo más justo.

En otro rincón del inmenso predio también estarían las actividades para las infancias y un lineup de espectáculos de lujo para niños y niñas que fueron con sus familias a disfrutar del festival. El Kidzpalooza es, desde hace un tiempo, un mundo propio, un oasis, dentro de Lolla y complementa de manera perfecta a todo el resto del día. Pero... ¿esa masa de jovencitos y jovencitas acaso se mueven para ver algunos shows de la grilla central? Sí, desde ya. Y la prueba de esto fue el concierto de Trueno quien, como todo artista central, tocó una hora reloj y cerró con dos temas imbatibles: uno en contra de la represión policial y otro en el que juega con el primer rap de la historia como intro para decir que es el turro más pegado.

Peques de ¿diez años? ¿siete o menos? cantaban felices las letras de un Trueno encendido ante miles de personas que saltaron sin parar al ritmo de sus canciones que tienen mucho de alterlatino, ese rock mestizo que caracterizó a los años 90 en nuestra región y el cual lo lucen hasta el día de hoy bandas de trayectoria como Las Manos de Filippi.

Para quienes ya son más millennial, y deciden por un momento olvidar que "Ciudad mágica" fue utilizada como himno macrista, se entregaron al baile con los hermanos Charpentier. Los papelitos dorados que fueron disparados desde el escenario Flow celebraron que Chano no solo está mejor después de sus internaciones por adicciones sino que, también, vuelve al ruedo la banda compartida con su hermano y que lo llevó a ser una de las figuras más populares años atrás. Tan Biónica regresa y lo anunciaron después de que el cantante aclarara que este show en Lollapalooza y uno más eran una suerte de despedida pero quizás cambió de opinión.