POLÍTICA | Vidal

Necesitados de fondos, los intendentes piden dar Presupuesto a Vidal

Aun con matices, algunos de los jefes territoriales del FPV y del massismo reclamaron avanzar en un "acuerdo" político sobre las cuentas bonaerenses. "Necesitamos articular con la provincia y esa herramienta", dijo Menéndez (Merlo). "La gente quiere que gobierne Vidal", lanzó De la Torre (San Miguel).

La falta de Presupuesto 2016 encendió el alerta entre los intendentes bonaerenses que, con las cuentas en rojo, salieron a pedir que se trate el proyecto lo más rápido posible para que la provincia pueda asistirlos financieramente. El gobierno de María Eugenia Vidal, en tanto, busca nuevos interlocutores dentro del Frente para la Victoria (FPV), fuerza clave para que su iniciativa tenga luz verde en la Legislatura, para negociar el tratamiento de los proyectos en las próximas semanas.

Más allá de las diferencias políticas, tras la sesión frustrada en la Legislatura bonaerense, jefes comunales del FPV y del massista Frente Renovador reclamaron que se apruebe el Presupuesto y el endeudamiento que los beneficiará, ya que -dicen- prevé "fondos frescos" y "obras" para los municipios. De momento, Vidal resolvió prorrogar el Presupuesto 2015 y disponer la emergencia en el Servicio Penitenciario, en Seguridad e Infraestructura por decreto.

Según consignó Tiempo Argentino, uno de los primeros intendentes kirchneristas en pedir que busquen "un acuerdo" fue Gustavo Menéndez, de Merlo. "Los intendentes necesitamos articular con el gobierno y precisamos esa herramienta", afirmó.

"Creemos que si tenemos un endeudamiento menor (45 mil millones de pesos) y si una parte (15 mil millones) se destina a los municipios para obras podemos arribar a un acuerdo", conjeturó Menéndez. Y aclaró que si la ley no se vota, "los vecinos sufrirán las consecuencias".

Mientras siguen los cruces, Vidal ya ordenó a sus hombres en la Legislatura tender puentes otra vez con el FPV.

El proyecto que iba a tratarse el martes pasado en la Cámara de Diputados provincial contempla un endeudamiento récord de más de $ 98 mil millones y US$ 740 millones.

A cambio de votarlo, el bloque del FPV -que comanda José Ottavis, de La Cámpora- pidió bajarlo a $ 35 mil millones y destinar $ 10 mil millones de la deuda que tomará el gobierno de Vidal a obras en los municipios. Al final de frenéticas negociaciones, la gobernadora macrista aceptó bajar las obliagaciones a $ 60 mil millones, incluido el fondo para las comunas.

El kirchnerismo, que con sus votos tiene la llave para llegar a los dos tercios que requiere el endeudamiento, se negó a aprobarlo y desde Cambiemos acusaron a la ex presidenta Cristina Kirchner de dar esa orden.

Otras voces

El intendente de Moreno, Walter Festa, respaldó la decisión de los diputados del FPV de no acompañar el proyecto. Pero manifestó la "urgente necesidad" que tienen los municipios de que se resuelva el conflicto. "Dependemos de los recursos que gire la provincia y la Nación y, si no nos envían los fondos, vamos a tener serios problemas económicos", aseguró.

En la misma línea, el jefe comunal de Hurlingham, Juan Zabaleta, pidió que "los legisladores se pongan en los pantalones de los 55 intendentes del FPV" porque "la discusión no es sólo legislativa, también es política y territorial, y hay que aprobarle el presupuesto a la gobernadora", mientras que su par de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, insistió en que "revean la posición para que los municipios puedan gobernar y solucionar la problemática diaria de la gente".

Desde el FR, los intendentes Joaquín de la Torre (San Miguel), Luis Andreotti (San Fernando) y Julio Zamora (Tigre) reclamaron al kirchnerismo que "deje gobernar". "Creer que esto es un problema de los kirchneristas contra los macristas es un reduccionismo. La gente quiere que gobierne Vidal y hay que escucharla. Hay que darle instrumentos", dijo De la Torre.

Mientras siguen los cruces, Vidal ya ordenó a sus hombres en la Legislatura tender puentes otra vez con el FPV, aunque pidió cambiar de interlocutor y correr de ese lugar a Ottavis, quien entienden que "no cumplió con los compromisos asumidos".

La estrategia de Cambiemos es hablar con los diputados que no se sienten representados por el camporista -un grupo de 12 legisladores liderados por Walter Abarca- y meterse así en la propia interna que vive el bloque. La prórroga del Presupuesto actual es una medida momentánea: a Vidal le urge tomar deuda para poner en marcha su plan de gobierno. Incluso advierten en su entorno que sin el nuevo presupuesto no podrán arrancar las paritarias.



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